EL MEJOR METAL/ROCK DEL 2021
Año glorioso para el Metal de nuevo, como lo llevan siendo en general los últimos que yo llevo siguiendo con más intensidad el género, incluido el fatídico 2020. Así que, sin más preámbulos, vamos a comenzar. Pero antes, como ya hiciéramos en el artículo del mejor cine del 2021… un par de mojones a citar:
- Premio a la purria del año: Still Sucks de Limp Bizkit y Bandera negra de Mago de Oz
Bueno, por un lado, tenemos a Limp Bizkit mostrándonos, una vez más, porqué su simple existencia es un absoluto crimen contra la humanidad y una anomalía que en realidad nunca debió de haberse dado. Pero vamos, que lo llevan demostrando desde… su primer disco. Esto solo es una constatación más. Una reafirmación todavía más rotunda. Quien nació ya muerto… ya no puede convertirse en zombi. No pienso eso de Mago de Oz. Para nada. De hecho, todo lo que va desde Jesús de Chamberí hasta Gaia III (incluido) me parece cojonudo. Ahora bien, a partir de ahí… entre la marcha de José Andrea y varios miembros más y la pérdida constante de las pocas neuronas que tenía Txus Di Felación (y de facultades compositivas, de paso), nos han hecho llegar hasta este último disco, en el que Mago de Oz colaboran con ese infragrupo llamado La Pegatina en un tema llamado… Tu madre es una cabra. Si, hemos llegado al apocalipsis.
- Menciones honoríficas: Servant of the Mind de Volbeat y el single Nazis en la luna de Gigatron
El primero está aquí por una simple razón. Ni me ha dado tiempo a escucharlo, pero es que seguro que es buenísimo. Teniendo en cuenta algún single que he escuchado y mi intuición, no creo que falle. Por otra parte, siempre hay que reclamar el Metal coña. El Reno Renardo, Nanowar of Steel, Nekrogoblikon, el genio Christopher Bowes con sus maravillosos Alestorm y Gloryhammer y, por supuesto, mis favoritos dentro del panorama esPPPPPañol, Gigatron. Creadores de maravillas como Mazinger Metal, Te peto el cacas o Apocalipsis molón, este 2021 han lanzado esta maravilla de canción llamada Nazis en la luna, repleta de chistes completamente memorables:
- Crazy Lixx: Street Lethal
Crazy Lixx llevan ya desde hace unos años siendo de los grupos que mejor Hard Rock/Glam Metal de tradición ochentera hacen. Este año no es menos, y se han vuelto a marcar otro bastante buen disco. Puede que un pelín peor que los dos anteriores, pero de nuevo repleto de buenas canciones, estribillos memorables y calidad.
- Accept: Too Mean to Die
Tras un decepcionante The Rise of Chaos y la posterior marcha de alguien tan mítico e importante en la banda como Peter Baltes, todos o casi todos pensábamos que Accept irían cuesta abajo y difícilmente volverían a entregar nada salvable. Pero resulta que Too Mean to Die ha sido un bastante buen álbum, que los devuelve prácticamente al nivel del sólido Blind Rage, con un Mark Tornillo que sigue en plena forma y cosas sorprendentes como la instrumental Samson and Delilah que siguen mostrando porque Wolf Hoffmann sigue siendo un peso pesado del Heavy Metal.
- Angelus Apatrida: Angelus Apatrida
Tras sacar hace tres años Cabaret de la guillotine, rebajar un poco la agresividad y subirle a la melodía (y de paso, hacer quizás su mejor disco junto al magistral The Call), nuestros albaceteños favoritos sacan esta vez su disco más furioso y crudo en años… y la mar de bien les ha salido la jugada. Otro buen discote bien sólido.
- Gojira: Fortitude
Por muy franceses que sean, hay que reconocer que Gojira son uno de los grandes baluartes y referentes dentro del Metal moderno más progresivo además de que, sacar tres obras maestras consecutivas de la talla de From Mars to Sirius, The Way of All Flesh y L’Enfant Sauvage no es ni mucho menos fácil. Dicho lo cual, tengo que decir que su posterior (y seguramente más exitoso) disco Magma, me decepcionó profundamente (más allá de algún temazo como Silvera o Stranded). Cinco años después, nos ofrecen este más que notable Fortitude que, aunque algo lejos aún de sus obras magnas, nos da temas tan tremendos como Born for One Thing, Into the Storm o Grind.
- While She Sleeps: Sleeps Society
Muy loable el camino que están siguiendo estos chicos, añadiendo poco a poco a su enérgico y dinámico Metalcore elementos más melódicos y alternativos (incluso electrónicos en este último disco) que, sin hacerles perder la esencia, le dan a su música un plus de variedad. Su punto máximo, para mí, seguirá siendo You are We, pero tanto Sleeps Society como su anterior disco, tienen calidad de sobra.
- Blazon Rite: Endless Halls of Golden Totem
Mientras titanes del Epic Metal como los pobres Manilla Road están ya fuera de juego (por razones obvias), Virgin Steele se dedican a torturarnos sacando el peor disco que les ocurre, y, lo peor… los sinvergüenzas de Manowar continuan perpetrando remásters de sus obras maestras clásicas, sin presentarse a conciertos que tenían programados ni dignarse a sacar una continuación digna a ese saco de heces putrefactas llamado The Lord of Steel o… quien sabe, volverse a sacar una foto con el monarca de los cuñados, Bertín Osborne.
Sin embargo… el trono del Metal con más músculo y testosterona no espera a nadie y va teniendo ya sus nuevos integrantes. Y otros que presentan credenciales para el mismo son los debutantes Blazon Rite, que nos dan una buena dosis de buen Metal épico, tintes de Power Metal ochentero y, ojo al asunto, ¡toques sureños! como si Manowar se crucaran con Lynyrd Skynyrd.
- Ominous Glory: The Elven Dream
Otro debut. Power Metal sinfónico-épico-neoclásico de mucha calidad. Lo más curioso del disco… dura una hora y veinte y no se me ha hecho largo en absoluto. Hay calidad aquí.
- Wesenwille: II: A Material God
Black Metal crudo, intenso y sin paliativos. Y, saliéndose de tópicos, con letras más sociopolíticas (aunque aquí se apoyan letras sobre infiernos, satanes, mitología nórdica, fantasía o naturaleza a secas, por supuesto). Ni idea de donde han salido estos tipos, pero… 100% recomendables.
- Seven Sisters: Shadow of a Fallen Star 1
Heavy/Power ochentero de extremada calidad, hecho por músicos en forma e inspiradísimos, captando muy bien la esencia clásica y arropados por una producción muy adecuada para este tipo de música. Además, para variar un poco, con temática de ciencia ficción.
- Powerwolf: Call of the Wild
Hombres lobo, terror, religión y fornicación. El maravilloso combo con el que Powerwolf se han convertido en una de las bandas del Power Metal en los últimos años y, de paso, en uno de los combos más sórdidos del momento, como demuestra este maravilloso vídeo:
- Cryptosis: Bionic
Swarm
- Inferi: Vile Genesis
- Vulture: Dealin’ Death
- Helloween: Helloween
10: At the Gates: The Nightmare of Being
9: Lorna Shore: …And I Return to Nothingless
8: Iron Maiden: Senjutsu
7: Unto Others: Strength
6: Beast In Black: Dark Connection
5: Rhapsody of Fire: Glory for Salvation
4: Greta Van Fleet: The Battle at Garden’s Gate
Quien me iba a decir a mí que aquellos Greta Van Fleet de sus primerizos eps iban a terminar haciendo uno de los mejores discos del año y uno de mis discos favoritos de Hard Rock clásico de los últimos años. Tampoco es que me disgustaran esos eps, pero ya saben… demasiado deudores de Led Zeppelin, eran. Sin embargo, su primer lp Anthem of the Peaceful Army me gustó bastante más, a pesar de que Led Zeppelin seguían bastante presentes, pero los notaba ya creciendo en composición y memorabilidad. Pero donde se coronan de verdad es en este The Battle Garden’s Gate. Un Hard Rock clásico con mucho toque de Rock más setentero, tintes psicodélicos y hasta pinceladas Prog. Magnífico. Seguid por este camino, hermanos Kiszka.
3: Turnstile: Glow On
En el apartado de purrias del año, se me ha pasado hacer mención de unos tales The Offspring con su Let the Bad Times Roll. Si Days Go By no gustó mucho (a mí, con el tiempo, se me ha hecho medianamente disfrutable), este ya, ni te cuento. Por otra parte, unos muchachotes llamados Turnstile nos sorprendían este año con su discazo Glow On, que tiene la maravillosa virtud de mezclar los mundos del Hardcore/Punk melódico con algunas cosas de Rock alternativo noventero, Pop o Indie sin quedar como auténticos pelagatos o sin marcarse un Refused sacando esa hez de unicornio llamada Freedom. El disco invita al pogo, divierte, saca una sonrisa a la vez que te lleva de vez en cuando por otros lugares bastante curiosos, haciendo canciones eclécticas a la vez que memorables. Un disco que puede sonar a Bad Religion y a Weezer sin despeinarse en absoluto merece ser alabado.
2: Trivium: In the Court of the Dragon
Trivium son la banda más en forma del Metal moderno
comercial (quizás con el permiso de Volbeat y Avenged Sevenfold, tan solo que
estos llevan cinco años sin sacar disco), aún más teniendo en cuenta cosas como
que una banda que sacaba discos tan fantásticos hace unos años como Machine
Head, decidió que era buena idea sacar un disco de Nu Metal en pleno 2018,
titularlo Catharsis y torturarnos los oídos con chungezes del tamaño de
Bastards…
Sin embargo, Matt Heafy y los suyos han decidido no tomar el camino fácil (tras intentar hacerlo un poco más en dos discos, sin salirle del todo mal en Silence in the Snow), retomar tiempos de esa obra maestra llamada Shogun y hacer lo mismo… solo que esta vez sacando tres obras maestras consecutivas. La última, este año con In the Court of the Dragon, un disco que no tiene miedo en mezclar Metalcore, Thrash, Groove, Progresivo y hasta toques de Metal extremo y, aún encima, conseguir que todas y cada una de las canciones sean absolutos himnos.
1: Lóstregos: Onde Calan os Corazóns, Ruxen as pedras
Y ahora llegamos a lo inaudito del asunto. Porque ya no es solo que mi disco favorito del año esté aquí en ESSSpaña (no porque no haya buena mierda, pero suele ser raro habiendo tanto y de tanta calidad) sino que aún encima sea de JALISIA. Y es que, amigos, Galicia… es tierra de Metal. Hay espíritus, meigas, naturaleza, conductores de tractor borrachos sin licencia y narcos que filtran cocaína dentro de una barra de pan. Joder, y además tenemos una de las intros más épicas de la historia de una serie de dibujos, y no de una cualquiera:
Comentarios
Publicar un comentario